La primera estudiante de intercambio que recibimos fue Fanny (Alemania), luego Thérese (Suecia) y ahora tenemos a Fawzi (Estados Unidos). La razón de tenerlas con nosotros es la oportunidad que supone para que cumplan sus sueños, aprender sobre ellas como personas y explorar el mundo de una manera inolvidable. Para nosotros, como familia de acogida, los estudiantes nos enseñan más sobre su cultura y sus tradiciones. Todas fueron adorables y siempre las echaremos de menos.
A las familias que nunca han acogido a un intercambista, puedo decirles que se convertirá en una persona que formará parte integrante de su familia y que conquistará pronto su corazón.
27-08-2012